Dedos infantiles están tocando a mis cristales. ¿Se escapó del cielo un ángel-niño sin que Dios lo advirtiera?
Cascabeles de vidrio resuenan tras mi ventana. ¿Llega acaso un trineo para llevarme a la fiesta de las hadas?
No es eso. ¡No!
Es un mágico visitante del Invierno.
Con zapatitos de plata está danzando en el alféizar. Mi corazón rompe sus ligaduras y sale a danzar con él.
¡Es el granizo que llega!
De “Magia invernal” puedo decir que me encantó. Sobre todo porque al final es una auténtica sorpresa saber que se trata de el granizo.
ResponderEliminarLillian, creo que debes perceverar y acercarte a una editorial. Tienes material de calidad como para hacerlo. El Blog no basta. Yo presiento que se acerca un reconocimiento de tu talento.