Bienvenidos a Mi Blog

Les doy la bienvenida a mi blog y les solicito encarecidamente que me dejen sus comentarios a mis entradas, pues su opinión es de gran valor para mí.



domingo, 8 de noviembre de 2020

SOLEDAD.

José se sentía muy solo. Caminaba  pensando que lo más probable era que en ese mismo momento, no hubiera nadie sobre la tierra que estuviera pensando en él.

¿ Puede haber mayor soledad- se preguntaba- que no estar en la mente de nadie?  ¿ Ser  tan anodino e incoloro que no haya nadie que te odie siquiera?  ¿ Ningun ser humano que te dedique un pensamiento maligno, que desee que ojalá estuvieras muerto?

Andar por las calles sabiéndose ignorado del mundo, le parecía lo mismo que ir caminando en medio de una niebla algodonosa.  ¡ Ah,  si en medio de esa masa gris surgiera de repente un rostro conocido!  ¡Alguien que al mirarlo soltara una exclamación de sorpresa y esbozara una sonrisa de reconocimiento!

Vio que en dirección contraria avanzaba un hombre que solía saludarlo cuando se encontraban en el Metro. Sintió alivio y se preparó a dirigirle la palabra. Algún comentario sobre el tiempo, cualquier tontería que lo obligara a detenerse y tomar consciencia de que él, José, estaba vivo... Pero, para su sorpresa, el hombre pasó a su lado sin mirarlo.

De pronto pensó : ¿ Y si ya no existo?

Sabía que había casos en que la gente se moría sin darse cuenta y seguía deambulando por las calles un buen tiempo. Hasta que un ánima caritativa le tocaba el hombro y le advertía:  Pare, amigo. La cosa se acabó, déjese de bromas...

Entró a un café y se acodó en la barra, frente al espejo. 

-Si estoy vivo,me  veré en él- reflexionó, esperanzado - Bien es sabido que ni los vampiros ni los muertos tiene reflejo.

Al principio no se atrevía a levantar la vista, pero de a poco fue subiendo la mirada por un vestón gris, una corbata azul y arriba, una cara triste y descolorida, que reconoció como propia.

¡ Menos mal!

Pero el aivio le duró muy poco. A su lado, acodado en el mostrador y saludándolo con una sonrisa de oreja a oreja, estaba Pedro, su viejo amigo.  Recordó  que hacía un año que había asistido a su funeral. 




7 comentarios:

  1. Bueno, muchos creen o imaginan esto...pero sabemos que aquello no es así...

    Uno debería gestionar siempre estar en bien con otros no?, para al final irse en paz.

    Abrazos.

    ResponderEliminar
  2. Las soledades son grandes compañeras que a veces amamos y otras detestamos.

    ResponderEliminar
  3. La soledad debe ser la muerte... donde tendremos que vérnoslas con nosotros mismos... Menos mal que por un rato, nada más.

    Abrazo, Lillian.

    ResponderEliminar
  4. Tu buen humor son como ráfagas que alegran a Juan.

    ResponderEliminar
  5. Eres culta .humorista e inteligente,tu posees casi todos los dones para intentar ser feliz.

    ResponderEliminar
  6. Eres amena y tu humor son ráfagas que están volando por mi blog.

    ResponderEliminar
  7. Solitude sometimes we love it and sometimes we hate it, is not it ?

    ResponderEliminar