Aquí
tienes mi corazón. Por favor, llévatelo y haz con él lo que quieras.
Usalo
para tapar la grieta en la pared que dejó el último terremoto.
O
muélelo en la procesadora y haz con él una hamburguesa para el gato.
Pero
tómalo, porque no sé qué hacer con él.
Me
pesa tanto como si fuera una roca ¡ y sin embargo es tan blando!
Incluso
tus palabras tiernas lo hacen sangrar. ¡ Imagínate la hemorragia que le provoca
tu silencio!
Llévatelo.
Estaré mucho mejor sin él.
Cuando
pase por las calles dirán: Es una mujer
sin corazón. Y automáticamente les
pareceré interesante y enigmática.
Y yo tendré la ventaja de no volver a
enamorarme. ¡ No conozco nada más inútil
que el Amor!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPues si
ResponderEliminarTanto abuso espanta
Lo es que el amor que vive en uno nunca muere .
El nos salva de las pequeñeces humanas