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domingo, 18 de febrero de 2018

LA MAQUINA PRODIGIOSA.

-¡ Mira, mi amor!- exclamó Melita, entrando al departamento que compartía con su novio-¡Mi tía Yola me dejó de herencia esta maleta!
-Jaja- respondió Felipe, despreciativo, sin despegar los ojos del computador- Seguro que no contiene nada que valga la pena.
-¡ No!  Yo creo que estará llena de cosas estupendas. A la tía Yola le encantaban las antiguedades.
La abrió y esparció sobre la alfombra un conjunto de sombreros viejos, albums de fotografías apolillados y un cuello de piel de conejo que había visto tiempos mejores.
-¡ Te lo dije, Melita!  Basura y nada más.
-¿ Y ésto? - preguntó ella, sacando del montón de trastos una especie de cajita negra- ¡ Mira!  Es una máquina fotográfica  antigua, de esas que entregaban instantáneas...
-Seguro que no funciona- respondió Felipe, con expresión desdeñosa.
-¡ A ver, probémosla!- dijo Melita, adoptando una pose sugestiva sobre el sofá.
Al principio, después del relampagueo del flash, no pasó nada. Felipe alcanzó a lanzar una risita , pero en ese instante, se escuchó un leve chasquido y la máquina vomitó una cartulina.
Ambos la miraron atónitos. En ella aparecía Melita, con el vestido veraniego que llevaba, pero se la veía mojada por una intensa lluvia y refugiada en un portal.
-¿ Qué es ésto?- se preguntaron ambos.
-¡ Qué máquina tan rara!- exclamó ella y sin darse cuenta, al manipularla, oprimió de nuevo el disparador.
-¿ Qué fotografiaste ahora? -preguntó Felipe.
-No sé, la puerta de entrada, creo...
En ese momento, la máquina entregó la fotografía.  En ella aparecía la puerta, pero abierta y por ella se veía entrando una mujer morena con expresión amenazadora.
Al verla, Felipe se puso pálido e intentó quitársela.  En ese momento, sonó el timbre.
Malita corrió a abrir  y la mujer morena de la foto se precipitó en el interior del departamento.
-¡ Así es que era verdad! ¡ Cínico, infeliz!  Todos me decían que me engañabas, pero yo no quería creer...
Melita la miraba consternada.
-¡ Mi amor,   te juro que no conozco a esta mujer!- le aseguró Felipe, tratando de cogerle una mano.
-¡ Canalla!- rugió la morena y tomando un florero, se lo arrojó a la cabeza.
Melita no quiso ver más. Llorando salió a la calle y se puso a vagar por el barrio, sin saber a donde ir. Mientras, el día de verano se había ido nublando. Gruesos nubarrones negros oscurecieron el cielo y empezó a llover torrencialmente. Melita quedó empapada en pocos segundos y corrió a refugiarse en un portal.
Entonces se acordó de la foto que Felipe le había tomado y de la que ella había tomado sin querer...y comprendió que era una máquina prodigiosa,  capaz de fotografiar el futuro.
¡ Tenía que recuperarla!  ¡ Valía una fortuna!  Y si el sinverguenza de Felipe se daba cuenta también, trataría de venderla  y quedarse con el dinero.
Regresó a las cercanías del edificio y se ocultó tras un árbol.  Al rato vio salir a la mujer morena, acompañada de Felipe. El parecía enojado, pero ella sin darse por enterada, se colgaba de su brazo y le daba besitos en la oreja. Muy luego, a él se le había pasado el enojo y juntos se alejaron hacia la esquina.
Melita subió corriendo al departamento. Sobre la mesa estaba la máquina. Ávidamente la tomó y entonces notó una etiqueta pegada a un costado. Decía:  Prototipo de ensayo. Prohibido venderla. Capacidad: dos instántaneas.
-¡ Mentira! - gritó Melita sin querer aceptar su mala suerte- Apretó el disparador, pero ya no hubo ni destello ni cartulina. La máquina estaba definitivamente muerta.
Furiosa la arrojó por la ventana.  Cinco pisos más abajo se acercaba Felipe y la máquina lo golpeó en la cabeza, haciéndole un chichón.
Melita lo vio tendido en la vereda, como un muñeco de trapo.
-¡ Mala suerte, no más!- suspiró ella-  ¡ Son cosas de la vida!

 Y se dirigió al dormitorio a preparar su equipaje.     


2 comentarios:

  1. Vaya que bueno!
    Me hubiese gustado tener esa máquina así años atrás...jajajjaja

    Nunca se sabe cómo y en qué modo atrapas a un mentiroso...
    Pero ya sabes lo que dicen , que se atrapa más rápido que un ladrón...

    buena historia.

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  2. Amor,desengaños,fantasias,son la base de casi todos tus cuentos,pero en este existe un drama humano

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