Bienvenidos a Mi Blog

Les doy la bienvenida a mi blog y les solicito encarecidamente que me dejen sus comentarios a mis entradas, pues su opinión es de gran valor para mí.



domingo, 23 de abril de 2023

MIRIAM.

Hacía semanas que Marcos no lograba escribir una frase coherente. Cada mañana se sentaba frente al computador, esperando en vano un soplo de la antigua inspiración. Escribía algunas palabras sueltas y luego las borraba fastidiado. Y así se le iban las horas sin lograr escribir ni un párrafo.

Recordó cuán diferente había sido todo, tan sólo unos meses antes. Se levantaba temprano, ya con la idea preconcebida para un nuevo cuento. Frente a la pantalla, las ideas fluían rápidas y certeras, expresando justo lo que él quería decir. ¿ Cuando había empezado a perder la inspiración, incluso el deseo de escribir, para concentrarse en un sólo pensamiento obsesivo?

¡ Miriam!  Sabía bien que había sido al conocerla a ella. La amaba con pasión y era correspondido de igual manera y era ese amor el que lo estaba consumiendo. Arrasando con su vocación de escritor, que había sido hasta entonces lo que más le importaba en la vida.

Sin darse cuenta, en lugar de escribir algo nuevo, empezó a escribirle a ella, con las mismas frases vulgares que los enamorados han empleado siempre. Mi amor, mi bien, te amo, Miriam...Miriam, Mimí.

Había acortado su nombre hasta dejar esas dos sílabas, que repetía con deleite. ¡ Mimí!

Fastidiado, borró lo escrito. ¿ Era posible que no se le ocurriera nada que tuviera el más mínimo valor literario? Y lo peor era que se acercaba el cierre del concurso de la revista  Paula. Año tras año había mandado algo y ya lo conocían en las oficinas de la redacción. A menudo quedaba entre los finalistas, pero eso no hacía más que humillarlo. ¡ El quería ganar!  ¡ Sería la puerta de entrada para el éxito!

Pero, así como iba, no lograría nada. Necesitaba librarse de esa obsesión que lo devoraba. Decidió romper con Miriam.

¡ Quizás este mismo dolor me sirva   inspiración!  pensó con cinismo. 

Ella lo miró incrédula, pero al comprender que hablaba en serio, sus ojos se llenaron de lágrimas.

- ¡ Marcos!  No puedes dejarme...¡ Yo te amo!

-Yo también te amo- respondió Marcos- pero quiero ser alguien y a tu lado, no soy nadie. Me absorbes, me aniquilas. Eres la ruina de mi carrera de escritor.

Miriam se colgó de su cuello llorando, pero él se soltó de sus brazos y se marchó sin mirarla.

Se sentía liberado. Estaba seguro que volvería a escribir como antes.

Con el transcurso de los días, la penosa impresión del rompimiento se fue borrando de su ánimo. Y algunas ideas que le parecieron buenas, fueron surgiendo lentamente en su mente.  Al cabo de una semana, ya tenía el cuento terminado.

Como ya casi vencía el plazo, el mismo lo llevó a la oficina de la Editorial. Se había hecho amigo de una de las secretarias y ella le prometió que lo llamaría apenas supiera algo.

Días después le anunció que ya estaba la lista de los ganadores y él se precipitó a la Redacción, lleno de expectativas.

-Lo siento, Marcos, no tengo buenas noticias. Este año ganó una mujer.

-¿ Una mujer, dices?

-Sí y tengo que reconocer que tiene talento. ¡ Escribió una historia de amor traicionado que nos conmovió a todos!  El jurado fue unánime...

-Por delicadeza podías ahorrarte los elogios. ¡ Dime de una vez como se llama!

-Mira, su nombre real no lo tengo en este momento. pero el seudónimo es cortito: Mimí.




4 comentarios:

  1. ¡Me ha encantado! Karma puro en ese final, Marcos se lo merecía.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias , Noelia, por opinar. Sí que se merecía perder. Él sabía menos del amor y de la vida que la pobre Mimí.

      Eliminar
  2. Talentosa despechada le dio una lección al escritor egoísta y perdedor que no supo valorarla. Bien hecho, Miriam.

    Abrazo hasta allá.

    ResponderEliminar